El Emperador
Ultima entrega de las Crónicas de Barathrum, campaña en dichas fantásticas y lejanas tierras, llenas de traición y tiranía ¡pero también honor y gloria!
Crónica
La casa de Hammerthäl
Una vez a salvo del caos del castillo los aventureros dirigen su atención a la embajada del Ducado de Hammerthäl en Caspia. Incursionan en los alrededores sigilosamente, intentando escabullirse en casas vecinas sin lograr ventaja alguna mas que asustar aún mas a los (aterrorizados por los seres mitológicos) residentes.
Ya cerca de la entrada de la embajada y al ver que una cuadrilla de caballeros sale a todo galope de su interior, Wolf impetuosamente atropella con su caballo al guardia que había en la puerta del recinto y se lo lleva del cuello dejándolo tirado a unos cientos de metros del lugar. Los personajes intentan forzar su entrada haciendo un agujero en la fuerte puerta y son recibidos a saetazos por un guardia. En el ínterin, Oh-Chul se hace del acceso al anexo y con cuidado investiga. Wolf vuelve de su distracción con el guardia y enciende una antorcha que tira dentro para explorar la zona, de lo que ahora sabe, es el establo, encendiendo parte de la paja e iniciando un incendio que obliga a los intrusos actuar con celeridad.
El guardia que había sido distraído vuelve y es sometido por Wolf junto con el ballestero. El primero, luego de cierto “apriete” del bárbaro, les dice que Otto y sus hombres salieron momentos antes a capturar al Emperador. Apresurados, deciden volver al castillo para intentar advertirle.
El Castillo
Los héroes se la ven difícil para entrar ante la invasión mitológica que sigue su curso y parece imposible de revertir por los soldados imperiales. De la nada, Mesha aparece y brinda a los personajes una vía de acceso por las paredes externas hacia una ventana. Una vez dentro, dan con Chekko a quien le informan de lo que esta sucediendo y este guía a un pasadizo secreto, la única vía de escape segura que dispone el Emperador y solo conocida por un puñado de hombres. Los personajes, desconfiados, insisten con que Chekko los acompañe.
Las Afueras
Una vez en las afueras del castillo pero aún en la ciudad, Chekko los lleva a la zona de rendezvous, donde no hay signos del Emperador y solo una pista de pisadas de caballos desorganizadas rumbo a la costa que los personajes siguen. Luego de unos pocos kilómetros de marcha y llegan a una zona rocosa de la costa, donde deben desmontar y proseguir a pié, a lo que Chekko aprovecha para desearles buena suerte y seguir su camino.
El Combate Final
Mientras prosiguen a pié por el campo de rocas, los personajes dan con varios cuerpos de caballeros que portan escudos y estandartes imperiales. A lo lejos, sobre la costa, ven luces y también movimientos de gente. Wolf arremete contra la playa y ataca al primero que encuentra, en una sección algo remota de la zona donde los guardias de Otto están preparando las embarcaciones para zarpar. Derio se escabulle por entre los soldados hacia el mar, con la intención de sabotear los barcos mientras que Lüd sigilosamente se esconde entre las rocas y se dedica a confundir e infringir dolor a los guardias de Otto con sus insultos y melodías.
Oh-Chul avanza contra los guardias desde la oscuridad utilizando todo el poder de los dioses y logra de hacerse de un caballo con una alfombra enrollada… y el Emperador dentro. Sin sentirse satisfecho y mientras Derio sigue haciendo hoyos en los veleros, Wolf combate guardias y Lüd brinda soporte a una distancia segura, cabalga hacia Otto que tras varios embates y al verse la situación comprometida, se retiraba rumbo a los barcos dejando un grupo de guardias para cubrir su huida que, sin embargo, el semi orco logra reducir con su corcel imperial. Tras un breve intercambio de ataques, Otto pierde la vida y se hunde en las aguas de Naimara. Con su líder dado por muerto, los soldados remanentes se repliegan en los veleros, dejando atrás a los exhaustos aventureros.
Una vez el Emperador a salvo, les promete oro y prestigio a cambio de ayudarlos en su intento de recuperar el trono. ¿Nuestros héroes tendrán el apetito por más aventura o se refugiarán en su finca a disfrutar de una plácida vida campestre? ¿Que motivó a Otto arriesgarse a secuestrar al Emperador ya dónde lo llevaba? ¿Que sucederá con Caspia y el Imperio ahora que su capital fue tomada por seres que se pensaban extintos y de mitología? Todo esto y más, será respondido en una próxima campaña en las tierras de BARATHRUM.
Nota del Director de Juego: Esta es la primer campaña que termino como DM. Agradezco a todos los jugadores que pasaron por Barathrum y especialmente a la actual camada, Luis, Juan, Agustín y Fernando que fueron los que estoicamente soportaron mis días de poca inspiración, meses sin juntarnos, distancias y horas de viaje, aportando ideas y camaradería en cada sesión y siguiendo con la buena onda fuera de la mesa. ¡Les deseo un 2020 mágico lleno de éxitos críticos! ― Gabriel